España ha sido testigo de una serie de trágicos incidentes de ataques de perros en las últimas dos semanas, que han dejado a tres personas heridas y, desafortunadamente, dos fallecidas.

Estos incidentes han generado preocupación y han resaltado la importancia de la responsabilidad de los dueños de mascotas y la necesidad de cumplir con las regulaciones sobre la tenencia de animales.

En este artículo, exploraremos en detalle los tres incidentes que han conmocionado a la comunidad.

Ataque en Pontevedra a una niña de cinco años

El primer incidente ocurrió en la aldea de O Ceo, en Fornelos de Montes, Pontevedra. Una niña de cinco años resultó gravemente herida después de ser atacada por un perro en la tarde del pasado domingo.

Las fuentes del 112 Galicia informaron que la niña sufrió heridas graves en la cara y en otras partes de su cuerpo. A pesar de la gravedad de sus heridas, fue trasladada al hospital Álvaro Cunqueiro, donde permanece ingresada y se encuentra en proceso de recuperación.

El perro involucrado en este incidente era un pastor belga, una raza que no está catalogada como potencialmente peligrosa. El animal tenía su microchip y toda su documentación en regla, y no era propiedad de la familia de la niña, sino de los vecinos de los abuelos de la víctima.

Los padres de la niña presentaron una denuncia, y el dueño del perro está siendo investigado por la Guardia Civil por un posible delito de lesiones. El perro fue puesto bajo custodia de una protectora de animales local.

Ataque mortal en Zamora

El segundo incidente tuvo lugar en la provincia de Zamora, específicamente en Roales del Pan. Una joven de 27 años perdió la vida después de ser atacada por varios perros mientras paseaba sola por un camino de concentración en el término municipal de La Hiniesta.

Los perros involucrados en este ataque eran cinco en total, incluyendo tres mastines y dos perros pastores de carea. La víctima había logrado avisar a su madre cuando los perros se acercaban, pero cuando su madre llegó al lugar, ya había sufrido el ataque y no pudo ser salvada.

A pesar de los esfuerzos del personal médico que llegó al lugar, la joven falleció. La Guardia Civil está investigando el incidente y tomando medidas legales en relación con los perros y su propietario.

Ataque en Alguazas a una anciana de 96 años

El tercer y más reciente incidente ocurrió en Alguazas, Murcia, donde una anciana de 96 años falleció a consecuencia de graves mordeduras infligidas por dos perros. El ataque tuvo lugar en El Paraje, y a pesar de la intervención de los servicios de emergencia, la mujer no pudo ser atendida a tiempo.

Los perros, que eran considerados de raza «potencialmente peligrosa», mordieron a la anciana en todo su cuerpo, desgarrando sus brazos. Los propietarios de los perros lograron detener la agresividad de los animales y calmarlos.

El Ayuntamiento de Alguazas sancionó a los propietarios de los perros y ha anunciado medidas ejemplares contra los culpables.

Además, se han abierto diligencias penales por los hechos, y la Policía Local, la Guardia Civil y la Asociación Nacional Española de Protección y Rehabilitación Animal (Anerpa) han participado en la investigación.

Investigaciones y posibles cargos

En el caso del ataque en Zamora, se ha señalado que el dueño de la explotación ganadera podría enfrentar cargos por homicidio imprudente. Los perros estaban sueltos y sin la presencia del propietario en la explotación.

Los animales involucrados incluían tres mastines, dos perros pastores de carea y dos cachorros de menos de un mes de una perra pastor de carea. Cuatro de los perros estaban correctamente identificados y vacunados, pero el quinto no lo estaba, y se está investigando si esto se debió a su edad.

En el caso de Alguazas, la irresponsabilidad de algunas personas en el cumplimiento de las normas sobre la tenencia de animales ha sido señalada como un factor clave.

Los perros considerados de raza «potencialmente peligrosa» no cumplían con la ordenanza municipal ni con la nueva ley de Bienestar Animal.

No tenían implantado el microchip, no tenían las vacunas actualizadas, no estaban censados en el municipio ni tenían un seguro de responsabilidad civil ni una licencia para su tenencia.